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La pantalla iluminada de la palanca de cambios es una obra maestra del diseño. Dado que no se conocía ninguna técnica industrial para lograr el acabado superficial especificado del componente híbrido cerámico en cuestión, la única opción era encontrar una nueva solución.
La pantalla iluminada de la palanca de cambios en un modelo de vehículo de lujo en particular es una obra maestra del diseño. Sin embargo, dado que no se conocía ninguna técnica industrial para lograr el acabado superficial especificado del componente híbrido cerámico en cuestión, la única opción era encontrar una nueva solución.
La multinacional líder en plásticos Oechsler, que se ha hecho un nombre como proveedor de renombre para la industria automotriz, declaró su voluntad de asumir el desafío. Oechsler encargó al integrador de sistemas Toolcraft la tarea de averiguar cómo realizar la tarea crucial de pulir la superficie cerámica de la pantalla. Toolcraft, a su vez, incorporó al desarrollador de software Unicam y al fabricante de robots Stäubli. Juntas, las cuatro empresas especializadas en tecnología se propusieron desarrollar una configuración de pulido viable para una línea de producción en serie. En el caso de las piezas híbridas cerámicas, es esencial pulir todas las secciones de la superficie de forma libre de forma ergonómica aplicando una fuerza uniforme y continua en todas las direcciones. La experiencia ha demostrado que esto debería ser posible utilizando herramientas especialmente desarrolladas, un robot de alta precisión y una planificación de rutas extremadamente precisa.
Los equipos de especialistas estaban sometidos a una inmensa presión para encontrar una célula de pulido viable, ya que el nuevo modelo de vehículo estaba a punto de entrar en producción. El resultado de sus esfuerzos se puede ver ahora en las instalaciones de producción de Toolcraft en Georgensgmünd, donde, desde hace algún tiempo, cuatro células robóticas idénticas han estado puliendo pantallas en una operación de tres turnos.
Se ha invertido una gran cantidad de conocimientos y experiencia en esta empresa conjunta. El proceso y la planta de última generación son completamente únicos. En el corazón de la célula se encuentra un robot industrial Stäubli TX90 de alta precisión, que está equipado para el proceso de pulido con un husillo de alta velocidad y un sistema de cambio automático de herramientas.
Andreas Bauer, Director de Robótica de Toolcraft, explica por qué solo esta máquina de seis ejes se consideró adecuada para su uso en la célula: "Para este proyecto solo se consideró el robot más preciso del mercado con un control de trayectoria perfecto. Gracias a su tecnología de accionamiento superior, solo la Stäubli TX90 pudo satisfacer nuestros requisitos. Para garantizar que el proceso se desarrolle de la mejor manera posible, los robots se calibraron con la máxima precisión en la planta principal de Stäubli en Faverges, Francia. Con este grado de refinamiento, pudimos lograr una precisión absoluta".
Además de la extraordinaria precisión de trayectoria de los robots industriales, las herramientas de pulido personalizadas desarrolladas internamente en Toolcraft y la programación precisa de la trayectoria por parte del equipo de Unicam han contribuido decisivamente al rendimiento de primera clase de la línea de producción. Las cuatro células robóticas idénticas están diseñadas para producir ocho versiones diferentes del componente en nueve estaciones de procesamiento.
Para garantizar la fabricación fiable y precisa de las piezas, se han integrado en las líneas de producción sistemas de control de la longitud de las herramientas. Una vez que se alcanza un límite de desgaste determinado, el robot Stäubli recoge una nueva herramienta de un intercambio de herramientas totalmente automatizado. Esto permite que la línea funcione con un alto grado de autonomía, un aspecto que es de vital importancia dada la naturaleza intrincada del trabajo y el hecho de que la fábrica está operando las 24 horas del día.
Durante el mecanizado simultáneo de la superficie de forma libre híbrida cerámica, la Stäubli TX90 debe ejercer una cantidad de fuerza totalmente uniforme para mantener un alto estándar de calidad constante. El controlador de robot CS8C aporta otra ventaja decisiva, ya que todos los programas tienen altos requisitos de memoria debido a su complejidad. La enorme capacidad de memoria del controlador da sus frutos, permitiendo un flujo de datos óptimo. En consecuencia, el rendimiento global de los robots, tanto en términos mecánicos como de tecnología de control, ha contribuido considerablemente al éxito del proyecto.
Las células de pulido robotizadas superaron las expectativas. Más allá de los aspectos puramente tecnológicos, lo que resultó crucial fue la sólida relación de trabajo entre las cuatro empresas y el compromiso permanente de todas las partes interesadas más allá de las fronteras corporativas. Sin la puesta en común de recursos, no habría sido posible realizar este concepto industrial único en el mundo, para el que no existe una alternativa de producción en serie.
